Palma de Oro en el Festival de Cannes y Oscar al Mejor Guión Original en 1956.
Un niño solitario encuentra un globo rojo... ¿o quizá es al revés?; y ambos, el niño y el globo mágico, vagan por las calles de París. Una sencilla anécdota es la base de este poético mediometraje sin apenas diálogos, que constituye la cima del talento de un cineasta absoluto pero desconocido: Albert Lamorisse.
Hermoso corto. hace uno días hice algunos comentarios en alguno de tus artículos / videos, creo recordar en la academia de Atenas, en el video de Goyeneche y en el concierto 21 de Mozart.
ResponderEliminarTe animo a que sigas enriqueciendo el espacio virtual con tus propuestas.
saludos
Si, los he visto y justamente ayer te respondí. Me quedé enamorada mirando paisajes de este lugar http://www.youtube.com/watch?v=HQCezmeLTfA
ResponderEliminarHola, Florencia
ResponderEliminarMe alegra ese enamoramiento por los paisajes que te descubre el video. El cantante, y la canción, es muy apreciado en mi país. Me alegra que estemos en contacto y espero de vez en cuando alegrar desde estas extrañas ventanitas de internet el "alma sin lugar" de esta rosarina. La madurez consiste, como la frutas, en empezar a pudrirse, así que las dudas son fantásticos aliados.